El agua y el aceite

Hace un tiempo, mientras estaba votando por primera vez, me acordé de los deseos que hace unos 3 años tenía de ser abogada. No tengo idea de cuál fue el disparador para elegir esa profesión, pero lo que sí se es que mis deseos de ir por el camino de la abogacía se diluyeron pronto para darle lugar al Diseño de Indumentaria. Y es gracioso haber llegado hasta Cine si me pongo a pensar que desde los 10 hasta los 14 años quería ser zoóloga. Mi asco por los órganos internos me boicoteó esa meta.
Así que ahora quiero cine, estudiar fotografía, violín (y algún día el cello), canto, orfebrería, diseño de indmentaria, vestuarismo teatral, maquillaje artístico, escenografía, filosofía, sociología. Lucía, ¡no te va a alcanzar la vida!